Tras el paso de Filomena por nuestra ciudad, hemos tenido que hacer una importante labor de depuración, limpieza y restauración de algunas zonas del huerto.
Más allá de eso,hemos estado podando la vid, transplantando desde el semillero a los bancales y plantando semilleros de zanahoria y rábano.
Un gusto volver al contacto con la tierra en nuestro huerto.